Jorge Issac Gómez Villegas “Las hojas construidas” |
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El ser humano construye a su necesidad y semejanza, para lo cual se puede pensar que la arquitectura es el reflejo de nuestra motricidad y fisonomía. El edificio como símbolo corpóreo del seno femenino para ser penetrado por nuestra existencia, cuerpo estático, recordatorio permanente de nuestro lugar en el mundo. La mujer, monumento carnal siempre cambiante desde su crecimiento, madurez y deceso, pieza visual análoga a la ciudad que puede ser capturada de manera fotográfica logrando representar al cuerpo como un objeto arquitectónico. |
